Las autoridades ya piensan estrategias para combatir la crisis, pero el panorama es poco favorable
El territorio estadounidense ha tenido una baja en los números de casos de COVID-19. A la vez, ha avanzado rápidamente en la aplicación de vacunas contra la enfermedad. Sin embargo, un experto aclara que la situación no es del todo favorecedora: EU se encuentra en el «ojo del huracán» debido a las variantes de coronavirus que ya circulan en el país.
Las autoridades y los expertos en salud piden a la población norteamericana que no baje la guardia, pues aún no es el momento para perder cuidado, ya que existen varias amenazas que podrían empeorar la situación actual.
En entrevista para CNN, el Dr. Peter Hotez, decano de la Escuela Nacional de Medicina Tropical de Baylor College of Medicine se mostró preocupado por el avance de las distintas variantes de COVID-19, las cuales fueron detectadas en Reino Unido, Sudáfrica y Brasil. Hasta el momento, se han detectado 700 casos de estas clasificaciones en Estados Unidos, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El experto indica que ya se está creando un plan para manejar la situación. Sin embargo, a la vez muestra que se espera un escenario desfavorable:
«El gran muro está a punto de golpearnos de nuevo y estas son las nuevas variantes», declaró el Dr.
La gran mayoría de los casos detectados de nuevas variantes corresponden a la cepa británica, nombrada B.1.1.7. Hasta el momento, está presente en al menos 33 estados del país. Los especialistas pronostican que podría volverse una versión dominante en EU, ya que se detectó que es más contagiosa. Y, en consecuencia, se desataría una tercera ola.
«Esto podría ser realmente muy grave para nuestro país a medida que nos acercamos a la primavera», afirmó Hoez.
Ante la situación, el gobierno estadounidense está duplicando esfuerzos para apresurar la vacunación y así inmunizar a la mayoría de la población. Pero, es necesario que los ciudadanos continúen acatando las medidas de prevención para evitar los contagios. Hasta ahora, 31 millones de personas han recibido, al menos, la primera dosis de inoculación, ya sea de Pfizer o Moderna y se espere que el número crezca notoriamente en los próximos días.
