
Será un proceso largo regresar los 386 cuerpos: jefe de peritos de la Fiscalía
El coordinador de Ciencias Periciales de la Fiscalía General del Estado en la Zona Norte, Héctor Jácome, informó que el crematorio Plenitud comenzó a recibir cuerpos diez días antes del hallazgo de los 386 cadáveres localizados en sus instalaciones, ubicadas en la colonia Granjas Polo Gamboa.
En entrevista, Jácome explicó que este dato se obtuvo gracias a la declaración de una familiar, quien relató que el 17 de junio una funeraria trasladó al lugar el cuerpo de un ser querido.
“Es el caso de una persona que nos mencionó que la empresa funeraria que se hizo cargo del cadáver de su familiar llevó el cuerpo al crematorio Plenitud el día 17 de junio, diez días antes de que se realizara el hallazgo de todos los demás cuerpos”, declaró.
Detalló que la identificación de ese cadáver fue posible gracias a una serie de tatuajes distintivos y a características físicas muy específicas, conocidas únicamente por la familia. Además, indicó que el poco tiempo transcurrido desde el fallecimiento facilitó la conservación de elementos clave para su identificación.
Hasta el momento, señaló, nueve cuerpos han sido plenamente identificados y liberados a sus familias, mientras que otros dos están en proceso de reconocimiento.
Jácome aclaró que el término correcto es “liberado” y no “entregado”, ya que los familiares no reciben directamente el cuerpo, sino que este es canalizado a través de una funeraria para los servicios correspondientes, como la inhumación o cremación.
Sobre el hallazgo de los cuerpos, el funcionario detalló que las labores de identificación iniciaron horas después del aseguramiento del inmueble, donde los 386 cadáveres se encontraban apilados en condiciones irregulares. Los restos fueron posteriormente trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) local.
Explicó que el equipo forense trabaja bajo protocolos internacionales, similares a los utilizados en situaciones catastróficas, como terremotos o accidentes aéreos, y que estos procedimientos están alineados con los estándares de Interpol, el Comité Internacional de la Cruz Roja, y la Ley General en Materia de Desaparición Forzada vigente en México.
“Ahora que estamos atendiendo esta situación del crematorio Plenitud, trabajamos con los cuerpos como se haría ante una tragedia de gran magnitud, aplicando técnicas precisas para obtener información concreta que facilite la identificación”, subrayó.
El coordinador reconoció que el proceso será largo y variable, por lo que consideró irresponsable fijar una fecha de conclusión. “Estamos trabajando lo más rápido y coordinadamente posible, respetando el dolor de los familiares, quienes ya habían concluido su duelo y ahora se enfrentan nuevamente a esta tragedia”, agregó.
Durante la entrevista, Jácome estuvo acompañado por Alejandro Flores, perito criminólogo con especialidad en dactiloscopía, quien explicó el procedimiento de hidratación cadavérica, técnica que permite recuperar huellas digitales para su identificación.
Este método, detalló, consiste en extirpar el pulpejo de un dedo, sumergirlo en una solución química a base de amoníaco, y posteriormente procesar la huella revelada. Hasta ahora, se han obtenido 77 huellas digitales, las cuales ya fueron enviadas al Instituto Nacional Electoral (INE) para su cotejo e identificación.
Flores señaló que el éxito de la hidratación depende del tiempo de embalsamamiento y de la cantidad de líquidos conservadores utilizados, factores que influyen en el estado de los tejidos.
Finalmente, Jácome anunció que esta semana se integrarán dos especialistas forenses provenientes de la ciudad de Chihuahua para fortalecer los trabajos de identificación y acelerar los resultados.