
Sean Baker sorprende a Cannes con ‘Anora’, un filme sobre el sexo y el poder
Muchas risas y aire fresco en un retrato sin estereotipos sobre la dignidad de las trabajadoras sexuales y sobre los niveles de poder. Eso es lo que ofrece Anora, un filme de Sean Baker que ha sido muy bien recibido en Cannes y que cuenta con una gran interpretación de Mikey Madison.
“Me acerqué a este filme en términos de temas y uno de ellos son los niveles de poder, las dinámicas del poder”, explicó Baker en una rueda de prensa para presentar su filme, con el que compite por la Palma de Oro de Cannes.
Una historia con mucho humor porque el realizador considera que “el humor es necesario en las historias humanas, es parte de nuestras vidas (…) no puedo soportar una historia que no tenga sentido del humor porque no es real”.
Anora se centra en Anie (Madison), una bailarina erótica y escort ocasional que conoce a Iván (Mark Eydelshteyn), un joven ruso de 19 años, hijo de un oligarca, con el que se casa. Pero, como era de esperar, la familia del chico no está muy de acuerdo.
Mucho sexo, mucho humor, grandes escenas de peleas y una demoledora crítica contra las diferencias sociales cada vez más grandes y evidentes en todo el mundo y un alegato a favor de la libertad de los trabajadores sexuales.